Para qué necesitas una estrategia de contenidos

Las publicaciones en las redes sociales de tu empresa tienen que ser parte de un plan de marketing estratégico que te permita comunicar y conseguir tus objetivos. Te explico cómo crear la mejor estrategia de contenidos.

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23/05/2020

Uno de los errores más grandes que se comete en la planificación de contenido para redes sociales es creer que cuanto más se publica mejor y que el tema es publicar, aunque sean cosas que simplemente se nos ocurran, sin estrategia, sin objetivos, sin plan. Gravísimo error y la gran razón por la que muchas empresas terminan fracasando en sus acciones de Social Media.

Antes que nada tenemos que tener presente algo importante: en las redes sociales no está la base de las ventas exclusivamente. No podemos estar vendiendo todo el tiempo. No sirve, aburre, no engancha.

En algún momento algo entrará pero no hay nada que anime a seguirnos si no hacemos más que intentar vender.

Proceso para generar una estrategia de contenido

Objetivos

Publicar por publicar, sin pensar en quién nos está leyendo o a quién queremos llegar. Una manera de tenerlo controlado es utilizar el método S.M.A.R.T.

S (Specific) – Específico

M (Measurable) – Medible

A (Achievable) – Alcanzable

R (Realistic) – Realista

T (Time-Bound) – Limitado en tiempo

Ejemplo de esto podría ser: Objetivo Aumentar seguidores, captar la atención de clientes potenciales, más suscriptores, más descargas de PDFs.

Metas

Relacionado con el punto anterior, es darle una cifra cuantitativa. Sabemos qué queremos, especificamos cuánto.

Por ejemplo: queremos aumentar seguidores, ¿cuántos queremos?

Audiencia de tu contenido

Definir nuestro target, nuestro buyer persona que tanto hemos hablado es vital. ¿A quién le hablamos? No es lo mismo si nuestro público es joven, con intereses muy específico a que si es mayor con poca experiencia en internet. Nuestra manera de hablar, contenido, tipo de colores incluso, deberá estar determinado por nuestra audiencia.

Tipo de contenido

Cómo será ese contenido según nuestra buyer persona o target, vamos a escribir post o regalarles ebooks, tutoriales, vídeos o infografías.

Medios para estar presentes

Dónde vamos a subir todo eso, en Youtube o Facebook, colgaremos lo mismo en todos o depende el tipo de contenido seleccionaremos una red social u otra.

Calendario editorial

Sabemos a quién, qué y cómo ahora definimos cuándo y para ello utilizamos un calendario editorial donde marcaremos al menos semanalmente las publicaciones que haremos. Escogeremos una fotografía con formato correcto para cada red social, un texto llamativo que le acompañe y si procede, un link optimizado a nuestra web.

Análisis de métricas

Hemos hablado en otra ocasión de las métricas, de los KPIs, una manera de ejemplificar esas métricas. Tenemos como objetivo aumentar los seguidores en Instagram, ponemos como META que sean al menos 400 más este mes, entonces nuestro KPI será nuevos seguidores.

Medir resultados

Y por último, tras un tiempo, debemos analizar los resultados de nuestra estrategia de contenido. Analizar comportamientos, estadísticas y saber qué ha funcionado y por el contrario, ver qué cosas no han tenido el éxito que creíamos iba a tener.

Es importante tener muy presente que el contenido debe ser original, ¡no copies y pegues jamás! aunque creas que esa web no se enterará, quien sí lo hará será Google y te penalizará dándole «puntos» a la web con contenido original y no a la tuya.

No todas las plataformas son iguales, por ejemplo en Instagram no puedes colocar un link dentro del post así que si quieres programar misma publicación en todas las redes, deberás colocar un optimizador de link para que puedan escribirlo fácilmente o directamente enviarlos a tu bio.

Aunque marcar tendencia, una línea de publicación es importante no aburras, escribe cosas diferentes, chequea en Google Trends si eso que vas a publicar ahora mismo está en tendencia.

¿Quieres que diseñemos una estrategia de contenido? Escríbenos y cuéntanos que has estado publicando para que podamos valorar por qué no has tenido resultado.