Cuando una empresa lleva demasiado con una imagen corporativa o simplemente nunca la ha tenido realmente y su imagen está obsoleta, toca renovarse. En este proceso de cambio surgen muchas dudas por parte del cliente, ¿perderemos nuestra fuerza como marca? ¿nuestros clientes habituales nos reconocerán?. Es aquí cuando el tener una imagen corporativa sólida nos marca la diferencia entre tener o no tener un camino recorrido.

La imagen corporativa es lo que nos identifica, nos es exclusivamente el logo, es el color de nuestra marca, aquel por el que los clientes nos reconocen entre otras marcas, es el isologo (identificador gráfico o lo que comúnmente se llama dibujo del logo).

Rediseñar o renovar, la diferencia

Aunque parezca prácticamente lo mismo, no lo es. Cuando rediseñamos estamos cambiando puntos claves, cambiamos tipografías probablemente, redibujamos isologos que puedan o no haber evolucionado del inicial y tal vez incluso seleccionemos como color corporativo uno diferente. Estos cambios muchas veces son más drásticos que la renovación y buscamos con esto un impacto mayor, buscado mayoritariamente por la necesidad de mostrarse como una empresa más seria, profesional y competitiva.

Cuando renovamos la imagen de una empresa, mejoramos lo existente sin alejarnos demasiado. Se utiliza en muchos casos para hacer rediseños en fases y que el cambio no sea tan drástico. Podemos cambiar el tono del color y no el color, elegir una tipografía similar más limpia pero no pasamos de una a su opuesta. Los isologos por lo general evolucionan como se ve en los ejemplos siguientes:

Si una empresa lleva 3 o más años con la misma imagen, el temor a cambiar puede resultar en un estancamiento como marca, esto se incrementa si la empresa lleva más de una década igual. ¿Por qué es importante renovarse? Porque la empresa debe demostrar que está viva, que está al día, que no teme el cambio, ir hacia delante, atreverse a modificarse para ofrecer lo mejor a sus clientes.

Así como cualquier empresa, sea del sector que sea, necesita invertir en maquinarias o herramientas de trabajo, la imagen, su web o incluso el comenzar a tener presencia en redes sociales es primordial para competir en un mercado empresarial cada año más desafiante.

Si quieres que estudiemos tu imagen y evaluemos la posibilidad de renovar o rediseñar la imagen de tu empresa, escríbenos y te asesoraremos sin compromiso.